Horario de invierno: menos horas de sol (bye fotosíntesis al salir del trabajo), días más cortos, frío, resfriados… So-co-rro.

Pero oye, no todo es tan malo. Porque cuando cae la noche, nuestra piel se activa y trabaja a tope para repararse de todo mal.

Esto es todo lo que ocurre en tu carita mientras descansas:

• La eliminación de las toxinas, que favorecen el envejecimiento y obstruyen los poros, tiene lugar entre las 8 p.m. y la medianoche.
• Después, sucede la magia y la piel se renueva eliminando los daños producidos por el día, como el de los rayos UV y la contaminación.
• La producción de colágeno y la elastina alcanza su punto máximo entre las 23h y las 4 de la mañana. ¡Y tú en pleno sueño REM sin enterarte!

Así que te vamos a compartir nuestras recos para que le saques partido a las noches largas y tengas un despertar radiante.

Limpieza profunda: la clave. Si eso falla, los poros se obstruyen, dificultando la renovación natural de la piel y eso favore la aparición de granitos, puntos negros y líneas de expresión. Este dúo es la pera para dejar tu piel limpita y lista para descansar.

Aplica un sérum específico. La noche es el momento perfecto para que los retinoides hagan su efecto. Este sérum de Ulé con retinol de larga duración, ayuda a reducir la profundidad, longitud y volumen de las arruguitas. Tú descansas y él le da un push a la regeneración de tu piel para combatir los signos de la edad.

Repara tu piel. Una buena crema regeneradora como esta de Ulé le da un empujón extra al proceso de recuperación nocturna gracias a su tecnología Cyclotonin Technology™. ¿Resultado? Piel descansada y radiante por la mañana. Consejito de la SBS: date un masajito facial, especialmente en zonas tensionadas (como el entrecejo y las comisuras).

Crea una atmósfera relajante. Deja el móvil, enciende una luz cálida (de nada por compartirte esta monadita portátil) para que el cerebro entienda que ya es momento de desconectar, y rocía un poco de spray relajante en tus sábanas y almohada. Este lleva sándalo y lavanda para favorecer el descanso profundo. 

Ya estás lista para dormir como un beibi.